¿Estás iniciando tu propio emprendimiento y no sabes por dónde empezar? En este post te recomiendo tres títulos que acompañan al emprendedor en este arduo pero interesante desafío.
“MBA personal” – Josh Kaufman

Muchas personas dan por sentado que necesitan ir a una escuela de negocios para aprender a montar un negocio de éxito o progresar en su profesión. Eso no es cierto. La mayor parte de la práctica empresarial moderna requiere poco más que tener sentido común, saber aritmética elemental y conocer unas cuantas ideas y principios de suma importancia.
La lectura de este libro te permitirá realizar un excelente trabajo, tomar buenas decisiones y sacar el máximo provecho de tus competencias, tus capacidades y las oportunidades que se te presenten, al margen de cómo te ganes (o quieras ganarte) la vida.
“Company of One: Por qué tu negocio NO debería crecer” – Paul Jarvis

En este libro de negocios encontrás una estrategia empresarial única para hacer que tu negocio funcione por vos mismo. El autor, Paul Jarvis, pone en perspectiva la clave del éxito entre escalar en una empresa y trabajar para uno mismo. Explica lo beneficioso que es “ser pequeño” como el atributo principal para tener la libertad de disfrutar los placeres de la vida y evitar los procesos tediosos de las grandes empresas.
“El método Lean Startup” – Eric Ries

Eric Ries define una startup como una organización dedicada a crear algo bajo condiciones de incertidumbre extrema. Esto se cumple tanto para aquellas personas que trabajan en el garaje de su casa como para un grupo de profesionales experimentados de una de las empresas que
aparecen en el ranking de la revista Fortune. Lo que todos ellos tienen en común es la misión de traspasar la incertidumbre para encontrar el camino hacia un negocio sostenible.
El enfoque que el autor nos muestra en El método Lean Startup hace que las empresas sean más eficientes en el uso del capital y que apoyen de manera más efectiva la creatividad humana. Se trata de poner en marcha diversas prácticas que acortan el ciclo de desarrollo del producto, miden el progreso real sin recurrir a los indicadores vanidosos y ayudan a entender qué es lo que realmente quieren los consumidores.