La literatura clásica trasciende épocas y culturas y sus páginas nos sumergen en las mentes de personajes inolvidables. En este post, les recomiendo algunos títulos, que a pesar de los años, siguen formando parte de la historia.
“El retrato de Dorian Gray” – Oscar Wilde
En este extraordinario primer volumen de sus esperadas memorias presidenciales, Barack Obama narra la historia de su sorprendente evolución de ser un joven en busca de su identidad a convertirse en líder del mundo occidental, describiendo con increíble detalle tanto su formación política como los momentos cumbre del primer período de su histórica presidencia, una época de una gran conmoción y de profunda transformación.
Obama invita a sus lectores a un viaje cautivador que va desde sus más tempranas aspiraciones políticas, pasando por la decisiva victoria de Iowa que demostró el poder del activismo comunitario, hasta la emotiva noche del 4 de noviembre de 2008, cuando fue elegido el presidente número 44 de los Estados Unidos, convirtiéndose en el primer afroamericano en ocupar el más alto cargo de la nación.
“Las mil y una noches”
Recopilación de cuentos orientales poblados de personajes tan míticos como Simbad, Alí Babá o Aladino. La historia comienza cuando, tras conocer y castigar cruelmente el adulterio de su esposa, el Sultán decide desposar cada día a una virgen, a la que hará decapitar a la mañana siguiente. Para detenerlo, la protagonista de Las mil noches y una noche, la princesa Sherezade, se casa con él, pero urde una treta: Cada noche le cuenta una historia, cuyo final pospone para la noche siguiente, en que inicia una nueva… Así logrará mantener durante mil y una noches el interés de su enamorado esposo.
“Guerra y paz” – León Tolstói
Obra cumbre de Lev Tolstói y de la narrativa del XIX, Guerra y paz constituye un vasto fresco histórico y épico. Con la campaña napoleónica -Austerlitz, Borodinó o el incendio de Moscú- como trasfondo, se narra la historia de dos familias de la nobleza rusa, los Bolkonski y los Rostov, protagonistas de un mundo que empieza a escenificar su propia desaparición.